Inventos cotidianos que nos facilitan la vida casi sin que nos demos cuenta
En nuestra vida diaria, nos encontramos rodeados de una gran variedad de inventos que han transformado la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos
Encantados de escucharte
Contacta con nosotros para cualquier duda o sugerencia
Registro de patentes y marcas en Murcia y Sevilla
Legismark lleva casi 30 años ofreciendo servicios especializados de Propiedad Industrial. En la Región de Murcia y Sevilla somos líderes y referente en protección y registro de marcas y nombres comerciales, patentes, modelos de utilidad, diseños industriales, identidad corporativa, derecho digital y protección de datos, entre los numerosos aspectos que abarca la propiedad industrial. Somos agentes oficiales y nuestro bufete se dedica en exclusiva a esta especialidad del derecho.
Cuidaremos de sus registros a todos los niveles y siempre según sus necesidades, tanto marcas nacionales, como marcas de la Unión Europea o marcas internacionales, a través del Acuerdo de Madrid.
Le mantendremos informado en todo momento de la publicación de cualquier nueva solicitud que pueda afectar a su marca gracias a nuestro software específico de vigilancia de parecidos e identidades. Le avisaremos de renovaciones de marca, pago de anualidades de patentes, modelos de utilidad y diseños, tanto nacionales como comunitarios.
El imparable avance de las nuevas tecnologías ha provocado que los derechos de propiedad industrial se vean atacados frecuentemente desde las redes sociales e internet. En Legismark le asesoraremos de los pasos a dar en caso de infracciones relacionadas con su marca o imitaciones que den lugar a confusión entre los usuarios y en ocasiones generan, incluso, mala reputación.
Protegeremos sus intereses en Derecho Marcario tanto a nivel administrativo ante la OEPM, EUIPO y WIPO, como contencioso-administrativo y ante los Tribunales de Justicia. Le ayudaremos con eficacia a resolver sus dificultades de registro preparando tanto contestaciones de suspenso como recursos.
Acreditaciones Internacionales
Los profesionales de Legismark están Colegiados y habilitados profesionalmente para actuar como Representantes y Agentes Oficiales de la Propiedad Industrial ante los organismos nacionales e internacionales más importantes.
Miembros de:
Agentes acreditados ante:
Últimos artículos
En nuestra vida diaria, nos encontramos rodeados de una gran variedad de inventos que han transformado la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos
La inteligencia artificial se centra en la creación de sistemas capaces de realizar tareas que normalmente requieren inteligencia humana. Por ejemplo, el reconocimiento de voz,
Las marcas genéricas son términos que han llegado a ser utilizados para describir una categoría entera de productos, en lugar de referirse a una marca
Una patente es un derecho o conjunto de derechos que son concedidos, en exclusividad, al registrar un invento con la finalidad de protegerlo. Esto proporciona el derecho de explotarlo comercialmente durante un periodo de tiempo limitado. Y, al mismo tiempo, impide que terceros puedan divulgar este invento sin el consentimiento del propietario.
La patente, además, es un título expedido por el Estado y que impide de forma temporal que otros puedan fabricar, vender o utilizar comercialmente este invento. Este documento acreditativo reconoce al creador y le proporciona todos los derechos, además de poner a disposición del público general su conocimiento.
Por tanto, podemos afirmar que una patente es un documento oficial concedido a un inventor. Este documento le cede el derecho de impedir que un tercero pueda copiarlo, utilizarlo, fabricarlo o distribuirlo sin su consentimiento explícito.
En el sigo XV Venecia destacaba por ser una ciudad en la que vivían muchos inventores. En el año 1474 el gobierno creó la primera ley que tenía como finalidad proteger los derechos de los inventores de la época.
Esta primera ley autorizaba a cualquier inventor a hacer un registro en una oficina del estado. De esta forma, el inventor adquiría una serie de derechos para que nadie pudiera copiar su idea. Esa primera ley ya proporcionaba una protección durante veinte años. Después de este plazo, cualquiera podría copiar y vender esa idea.
Esta ley poco a poco se fue extendiendo por todo el mundo y, hoy en día, todos los países cuentan con su propia legislación en esta materia.
El titular de una patente deberá explotarla, bien por sí mismo o a través de una persona autorizada. Además, deberá describir su invento para que un experto en la materia pueda desarrollarla.
La explotación de la patente deberá realizarse dentro del periodo de cuatro años, si tenemos en cuenta la fecha de la solicitud de la patente. O, de tres años, si tenemos en cuenta la fecha en la que se publica la concesión. En este caso, se aplicará aquel que finalice más tarde. En el caso de que la patente no sea explotada podrá caducar.
Los modelos de utilidad sirven para proteger inventos de menor rango que una patente. En general, podemos decir que un modelo de utilidad sirve para registrar mejoras a aparatos ya conocidos. En este caso, podríamos decir que se aplica a invenciones mecánicas.
Todas las invenciones no pueden ser patentadas. Estas deberán cumplir una serie de requisitos para poder hacerlo:
Las patentes sirven para proteger y recompensar a los inventores. En la mayoría de los casos, existe un largo periodo de investigación y trabajo para desarrollar una idea de modo que pueda resultar útil y viable.
De esta forma, las patentes fomentan la difusión de nuevos conocimientos que, al mismo tiempo, pueden ayudar a otras personas. Incluso pueden dar lugar o facilitar el avance en otros campos de la ciencia o la tecnología.
Al igual que patentar una idea proporciona una serie de derechos a su inventor, no patentarla supone que cualquiera pueda copiar, vender o distribuir dicha idea. Es decir, el inventor se quedaría sin el reconocimiento o beneficio que podría resultar de esto.
En España la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) es la encargada de las patentes y las marcas. Este es un organismo de carácter público que depende del Ministerio de Industria, Energía y Turismo.
La OEPM es la encargada de conceder y registrar los títulos relacionados con la propiedad intelectual. Además, ofrece protección jurídica a los distintos tipos de propiedad intelectual mediante la asignación de patentes, diseños industriales, marcas, nombres comerciales, etc.
Una marca es un signo distintivo que sirve para diferenciar un producto o servicio de otros. Además de identificar su origen empresarial. También funciona como indicador de calidad y una forma de promocionar su venta. Por tanto, una marca también desempeñará la función de diferenciar un producto del de sus competidores. Una marca puede ser un nombre, un signo o, incluso, un sonido.
Según la OEPM, una marca es:
“Una marca es un título que concede el derecho exclusivo a la utilización de un signo para la identificación de un producto o servicio en el mercado. Pueden ser marcas las palabras, o combinaciones de palabras, imágenes, figuras, símbolos, gráficos, letras, cifras, formas tridimensionales (envoltorios, envases, formas del producto o su representación”. Ley 17/2001, de 7 de diciembre, de marcas.
Con respecto a la marca, podemos diferenciar entre marca individual, marca colectiva, o marca de garantía:
Un ejemplo de ello podría ser Apple. Dentro de esa marca podemos encontrar iPad (ordenador), iPhone (teléfono), etc.
Una marca siempre será registrada en relación a un tipo de productos o servicios. Puede existir la misma marca, como por ejemplo el mismo nombre, siempre y cuando sean de productos completamente diferentes y no copie el nombre de una marca renombrada, es decir, conocida por la mayoría de los consumidores.
Para registrar una marca, lo primero que debemos comprobar es si la marca que queremos registrar ya existe. Para ello es posible acudir a la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM), en cuya web hay un buscador, aunque, sin duda, la manera más segura de realizar una investigación sobre parecidos e identidades de marcas es acudiendo a un despacho especializado en Propiedad Industrial, donde le orientarán además, sobre la viabilidad de la marca, que puede toparse con otro tipo de objeciones en el proceso de registro.
Técnicamente para referirnos a una marca, lo más adecuado es utilizar la palabra registrar. Según la Real Academia Española, registrar consiste en “inscribir con fines jurídicos o comerciales la firma de determinadas personas, o una marca comercial”.
Patentes y marcas. Desde 1993, Legismark ofrece la totalidad de los servicios necesarios para garantizar la protección de su marca tanto a nivel nacional como internacional.
MURCIA
SEVILLA